Desde su más temprana edad, nuestra hermosa tierra ha sufrido grandes transformaciones físicas que han ido moldeando los distintos relieves y paisajes que gozamos hoy día. Sin embargo, muchos de estos cambios se producen de forma abrupta y violenta, constituyendo un gran peligro para la especie humana; al ser incontrolables para el hombre, y muchas veces impredecibles, no nos queda más que prepararnos para hacerles frente, tratando de evitar un daño mayor. Es necesario para ello asumir consciencia plena de que fenómenos, tales como: inundaciones, terremotos, tormentas, entre otros, pueden ocurrir en cualquier momento, por lo que debemos educar a nuestros niños en materia de desastres, brindándoles así herramientas que les ayuden a superar con éxito situaciones como esas.
Post: Edmy Contreras
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